¿Qué día fue que cambiamos?

¿Qué día fue aquel que cambiamos? Aquel que ya nada vuelve a ser igual, ese que un beso es una obscenidad, un abrazo sincero algo lascivo y unas palabras bonitas un gesto de posesión. ¿Cuándo cambió la definición de amor de toda la vida por la de sexo de una noche? Lo que alimenta tu odio a mi me llena de tristeza, porque no me esperaba esto de un género que consideraba tan maravilloso. 

Yo no voto por feminismo, ni tampoco por machismo ni un igualitarismo extremo, por consiguiente, no apruebo la forma de se ser de las conocidas «feminazis» o «hembristas». Si poco a poco nuestra sociedad está derrotando al racismo, ¿qué sentido tiene dar un paso atrás y cometer el mismo error que cometieron los hombres de antaño? Soy consciente de los siglos que la mujer ha estado bajo el dominio de hombre y que todavía se siga ejerciendo me llena de impotencia.

Pero esa no es razón para darle la vuelta a la tortilla, y odiar a todos los hombres por el pecado de unos, por desgracia no pocos. Volver un paso atrás nunca fue buena idea y menos si la violencia está de por medio, por eso me llena de tristeza ese odio tan gratuito que no lleva a ninguna parte. Ese que odio que separa en vez de unir, que va distanciando la distancia que intentamos conseguir acortar entre mujeres y hombres.

No entiendo cómo es posible que si yo te respeto tanto tu condición como orientación sexual, porqué no eres capaz de abrir tu mente a los que no somos igual que tú, que no queremos esa utopía que promulgas donde un género está por encima del otro, que es en el fondo el mismo perro con distinto collar. Pero lo que no voy a consentir es que te metas con mi novia por estar saliendo conmigo, un hombre, como si yo la hubiera forzado a estar conmigo.

A mi, al igual que cualquier persona que precie su dignidad, no me gusta ser insultado de esa manera tan gratuita, y mucho menos que insultes a las personas que más quiero. Y ahora te diré bien claro que un «te quiero», un «qué guapa estás hoy» o «quiero pasar contigo el resto de mi vida» no es ningún gesto de opresión, ni hay machismo en esas palabras, porque las uso yo con mi novia, las pueden usar dos mujeres que se quieran.

¿Cuándo nos vamos a dar cuenta que enfrentar a ambos géneros es algo incoherente? Tanto mujeres como hombres somos diferentes, y es algo obvio, pero no así ante la ley, puesto que, en teoría, ante ella deberíamos ser todos iguales, ibídem para cualquier labor. Pero está claro que nuestro carácter, por lo general, es distinto y nuestra forma de pensar no es exactamente igual, sin embargo es no quita para que seamos complementarios.


Sinceramente, no sé cuando fue ese día primero que el hombre se enfrentó a la mujer y la mujer se enfrentó al hombre, no sé qué día la relación, de iguales, se tornó a una dominación del uno sobre el otro, dejando el amor aparcado para otro día. No sé qué día cambiamos para divorciarnos con la vida y catalogar con etiquetas a las personas por su orientación sexual, por lo que sienten y prefieren. No sé cuando se inició esta absurda guerra de sexos, pero por mi parte estoy dispuesto a firmar la paz.


Comentarios

más leídas